Comillas-Unquera

La etapa no es corta.  Como se ve en el gráfico, tiene dos tramos de subida, aunque los desniveles no son importantes, porque el punto más elevado apenas alcanza los 120 metros de altitud.

 

            Aunque no faltan los firmes de tierra, la mayor parte del recorrido discurre sobre suelos asfaltados de carreteras secundarias.

 

El camino sale de Comillas siguiendo la Avenida del Marqués de Comillas,  bordeando los jardines del Palacio de Sobrellano, que se deja a la izquierda  y continúa por la carretera CA 131, hacia el barrio de Rubárcena.

            Más adelante se encuentra el puente que salva la ría de La Rabia.

            Estamos muy cerca de la playa de Oyambre y del Parque Natural del mismo nombre, espacio en el que anidan multitud de aves acuáticas, patos, cisnes, garzas, espátulas, etc.

 

            Después de cruzar la ría, girando a la izquierda, se sube hacia la ermita de la Virgen del Tejo , desde donde se observan bonitas panorámicas del Parque Natural y de los Picos de Europa. Esta ermita son los únicos restos que perduran del monasterio fundado por Alfonso VIII, en el que se acogieron muchos peregrinos.

 

            Una vez rebasadas las minúsculas aldeas de El Tejo y Casa, junto a la ermita de San Juan, por camino de tierra se salva el regato de El Capitán, pasando posteriormente junto a la casona y capilla de Santa Marina.

 

            El camino sigue hacia el pueblo de La Revilla, pero no entra en el núcleo urbano. Sí pasa ante la pequeña iglesia de San Pedro, cerca de la que intentará colocarse el autobús para hacer la primera parada.

 

             Tras dejar atrás la iglesia de San Pedro hay que seguir una pista de tierra que asciende hacia el alto de Riboria, desde el que ya se pueden contemplar las marismas de San Vicente y en la lejanía, de nuevo, el macizo oriental de los Picos de Europa, y mirando hacia la derecha la playa de Merón.

 

            Por camino paralelo a la carretera N634, se desciende  hasta el borde de la ría que forma la desembocadura del río del Escudo, antes de cruzar el larguísimo -dice la tradición que el que lo atraviesa sin respirar, se casará pronto-  puente de La Maza o del Deseo.

            La magnífica obra de sillería, que contaba con 32 arcos, de los que actualmente se conservan 28, se levantó a finales del siglo XV, por orden de los Reyes Católicos.

            Ahora el camino apenas entra en el núcleo urbano de San Vicente, una vez pasado el puente, dejando a la izquierda las ruinas del convento de San Luis, continúa por la Ronda de la Encrucijada y Camino Alto de Santiago, para tomar la carretera local que llevará directamente a La Acebosa.

            En otros tiempos los peregrinos que llegaban a la noble villa de San Vicente de la Barquerasubían por la calle Alta en busca del hospital de peregrinos y de la iglesia-fortaleza de Nuestra Señora de los Angeles;  salían después del recinto amurallado por la puerta de Peregrinos en dirección a Unquera.

            La antigua villa, colocada entre dos lenguas de agua, fue desde antiguo cuna de expertos marinos que se embarcaban en arriesgadas campañas en  busca de las ballenas del Océano Atlàntico o el bacalao de Terranova. El de San Vicente fue uno de los principales puertos de la corona de Castilla, junto con Laredo, Castro y Santander.

 

            Desde La Acebosa y su iglesia de San José, un camino bastante empinado lleva hasta el cementerio y después a los lugares de Hortigal y Estrada, donde puede verse la torre de los Estrada, baluarte medieval de la familia que regía la comarca y que tiene la peculiaridad de que alberga en su interior una capilla.

            El camino sigue hacia la aldea de Serdio, donde comienza el descenso hacia Muñorrodero, a la orilla de la ría de Tina Menor

            En Muñorrodero hay que utilizar la N 634 para salvar la ría, el ferrocarril y la autovía para llegar poco después al pueblo de Pesués.

            Los últimos kilómetros discurren por pistas de tierra y carreteras locales hasta llegar a las inmediaciones de Unquera, a la orilla del río Deva y de la ría de Tina Mayor,  estamos a las puertas del Principado de Asturias.